[2017] I Maratón de Langreo y I Media Maratón de Langreo

[Julián11]

      

I Maratón de Langreo y I Media Maratón de Langreo

Domingo, 1 de Octubre de 2017 Hora: 08:30 Pais: ESPAÑA Provincia: ASTURIAS Población: LANGREO Lugar de la salida:  Por determinar, se ha de homologar Lugar de la meta: Por determinar, se ha de homologar Distancia: Maratón Web oficial: http://www.maratonlangreo.es Cuota de inscripción: 25 € Enlace a inscripciones: http://www.maratonlangreo.es/inscripciones-maraton-de-langreo/ Otros datos de interés: También MM (de 6 a 9 euros, si eres federado, sin o con bolsa del corredor y de 9 a 12 si no lo eres). El precio de 25 euros no pone de momento que suba a partir de ninguna fecha. Circuito a dos vueltas.

[Julián11]

Inscrito ya.
De nuevo tras muchos años otro maratón en Asturias. De precio bastante económico, y aún más lo es la media maratón, de 6 a 12 euros, por Madrid se ve ya muy poquito lo de 12 en una media (de 6 ni hablamos).
Pretende ser bastante urbano el recorrido
http://www.maratonlangreo.es/recorrido-maraton-de-langreo/

[antoniojaen]

Gracias Julian por la información, ya me he inscrito... A la semana siguiente toca Burgos.

[Rafa_zam]

Por esas fechas estoy de vacaciones, asi que estaremos atentos al hilo....y excursion a por sidriñas

[Julián11]

Gracias Julian por la información, ya me he inscrito... A la semana siguiente toca Burgos.

Burgos, Palma, Bilbao y si se puede Dublín, ya veremos en las que coincidimos ese mes.
A ver si se empeizan a animar las inscripciones y si van dando más info.

[Julián11]

Como no voy a estar jodido. Tres semanas sin maratón, las crueldades organizativas sí conocen frontera, desde Pamplona, que no había un maratón de asfalto en suelo español. Cuando paro me estropeo (sí, aún más), y aunque he procurado parar poco, la falta de pruebas exigentes no me ha permitido recuperarme, con lo cual sigo en las condiciones del último maratón. Y además más de una vez he evitado entrenos por las molestias, aunque es cierto que no me hace falta excusa alguna para no entrenar, cada día tengo menos ganas, tal vez porque me parece que soy un poco flojo en calidades, y sólo en las pruebas doy el máximo, que por poco que sea es más que nada: Hasta quedo satisfecho de las marcas finales, porque sé que valgo menos, pero las ganas e ilusión me ayudan a maquillarlas.

Pues este finde empieza la feria de maratones (si no encuentro uno el día del 3 de diciembre serían 9 seguidos -11 si encontrara alguno-, si lesiones u otros problemas no lo impiden). Y con dos pruebas el sábado por la mañana, para examinar mis opciones, y meter dos entrenos de calidad, lo malo, es que sin descanso tenía que estar ya de camino a los 80 minutos de entrar en meta en la última, habiendo cruzado Madrid, duchas, y platillo de macarrones, casi de pie, mientras me hacía bocata para el viaje. Era la única forma, y gracias a mi amigo Antonio Rojas, que también iba al maratón y él desde Jaén, hasta me recogía muy cerca de casa. Bocata y café rápidos por el camino y casi a las 7 en Langreo, hasta usó mi móvil de gps (aparte de whatsapp en móvil no uso nada, demasiado pequeño para mis ojos (ni con gafas), por no hablar de mis dedazos. Recogemos la bolsa del corredor, no muy abultada, el dorsal, dos papeles de publicidad, etiqueta para poner en la bolsa que dejemos en el guardarropa, la camiseta y una bolsa de plástico para llevarlo, poca cosa, pero también es cierto que la inscripción no era nada cara, 25 euros. Una de las personas que dan los dorsales me preguntan si yo era el de Ponteareas, le digo que sí, sin pensar que seguramente había más gente en la prueba de 6 horas del pasado julio, me dice que aquella la hice marchando, y confirmo que sí, de nuevo, que aquella y todas las otras que he hecho.

Ceno en la habitación y sólo salgo a tomar un café cerca del hotel. Tengo que cuidar el presupuesto, y comerte un poco de pasta y tortilla de patatas fríos en la habitación puede visualizarse un poco deprimente, pero no están malos, y en esa habitación está el cuartel de concentración que sólo existe cuando viene precedido de un maratón al día siguiente, así que para mí son momentos especiales, nada grises, aunque con macarrones y tortilla de patata calientes habría estado mejor, no importa disfruto de esos momentos, aunque con los miedos que nos genera a cada uno el maratón, los míos vienen presididos siempre por la angustia de lo malo que soy (o que estoy, esto es más correcto), y los dolores que pueda sufrir durante la prueba y si me impiden (o no) hacerla como siempre pretendo, al máximo nivel que de mi yo entero.

No son ganas de enrollarme, sólo pretendo se vea desde el punto de vista que lo vivo yo. Ni hay ni se pretende que nadie que llegue a leer esto, lo vea así, como yo cuento. Ya dormí poco el viernes (3 horas) y fueron dos horas y algo más el sábado noche, al menos intenté estar tumbado todas las horas posibles. El día se presenta mucho mejor de las previsiones que había 10 días antes (que eran de lluvia la mayoría de días cercanos al 1 de octubre, y ese día con más agua que ninguno. Pero fueron mejorando, y va a ser un día nublado (luego lo fue a ratos) y empezando sobre 14 grados hasta acabar sobre 20 (yo, los buenos no creo que pasaran de 17), siendo la salida a las 08:30.

Voy a llevar la equipación de España, normalmente la llevo en los maratones internacionales y en los 4 majors españoles, pero este domingo es uno de esos días, que jamás me hubieran gustado que amaneciesen, en Cataluña (y en Barcelona más sorprendente, con lo cosmopolita y culta que presumía los últimos 30 años), se va a hacer lo que todo el mundo ya sabe, y que aunque no va a tener valor oficial, si es el principio oficial de una guerra sucia, se van a victimizar, y con la ayuda de muchas personas que antes eran normales, más todos los que han ido creciendo con adoctrinamiento protegido por los diversos gobiernos españoles, hacerle la vida imposible a Policía y Guardia Civil, y al resto de españoles, y lo que es peor, a esos millones de catalanes que se ven normalmente españoles y que tienen un día a día cada vez más imposible. No, tranquilo quien lea esto, no sigo, sólo pretendo mostrar, fugazmente, mi estado moral de ánimo, no soy de llevar banderitas (sí a  eventos internacionales, o podios), especialmente, pero la camiseta de la selección sí (la llevé en campeonatos de veteranos representando a España), me gusta competir con ella, me encanta. Ya nos fuimos mis hijos, mi mujer y yo, por el tema hace 15 años, y fue decisión de mi mujer (que tiene todos los apellidos catalanes que yo no tengo, porque allí no tiene derecho a opinar quien no piensa como ellos), porque me conoce y soy bruto que un arado, no me habría callado a que me vacilasen o amenazaran.

Ya me he desviado todo lo que he podido, bueno todo no, que menos mi mujer, muchos piensan que estoy desviado del todo, no va a estar ella acostumbrada, con todo lo que me ha visto hacer. Pocas cosas le extrañan, el primer maratón me dijo muy seria que si pasaba cualquier cosa abandonase, que no fuera Julián, digo cabezón. Actualmente me pregunta cómo ha ido, ni se plantea que si tomo la salida no lo acabe. Hasta hoy me han preguntado, que si mi mujer me deja ir a tantos. Ella va al teatro, contesto y me parece estupendo (a mí no me gusta ir, es más caro que el cine y se duerme mucho más incómodo), de hecho con eso ya tengo mi permiso para dos maratones más. Sí, efectivamente va bastante al teatro, incluso ha trabajado en obras, traduciendo y adaptando (las obras, a mí no hay quien me adapte ni adopte). Pues eso, no más interrupciones, que aún no estamos ni en la línea de salida, a ver si voy a llegar tarde.

Pues ya en la salida, suena antes the final countdown, una que ni conozco ni menciono, pero que me recordaba al conejo de la Loles de Pajares y al final era el Highway to hell. Menos mal que no ponen Bruce Springsteen, les podrían haber arrestado, por llevar la contraria a las bandas sonoras de todos los maratones. Estoy con más que con nervios con algo de emoción, los momentos que preceden a la salida, son algo especiales, no dejan de serlo porque lleves muchos maratones. Se da la salida, y arrancamos, entiendo que algo más de 300 (mayoría para la MM), poco a poco empiezan a pasarme, ya estirando notaba la rodilla, así que al mal tiempo (nublado), buena cara, que además todos los corredores están de muy buen rollo. Público sólo había en la línea de salida, callejeamos un poco, continúa pasándome todo el mundo, muy pronto Quique Benito, y luego los dos Antonios (Rojas y Huerta) que van con 7 y el globo de las 4 horas, les digo si no es muy rápido el ritmo para ellos y dicen que no, se alejan, pero no mucho, los llevo algún km más a la vista, al km 4 ya me marca 24m aunque por el gps voy claramente por debajo, ya interpreto que el ritmo en el gps lo tengo que mirar de aquella manera. Del 3 al 4 nos hemos cruzado en carril de doble sentido y animado un poco unos a otros (uno y otros, porque voy ya bastante solo), en todo el circuito el público que hay es voluntarios, policía local y fotógrafos, está claro que en Asturias la foto deportiva les mola, eso está bien.

El 5 lo paso por debajo de 31m y trato de que no se me vaya a mucho más de 6min/km lo que me falta hasta el km10. Creo lo consigo, salimos a una carretera larga de doble sentido, y esta vez sí nos cruzamos mucho y mutuos ánimos en todo momento, va muy bien, porque somos casi el único público que tenemos, nosotros mismos. Cruzamos cerca del centro, pues nos vamos al otro lado de la población, pocos, pero aquí sí encontramos algo de público y nos animan a todos. Trato de llevar un ritmo decente, y paso el 10 muy poco por encima de 61 minutos. A la vuelta por carril contrario veo que sólo llevo 6 corredores detrás (dos son Sonia y Pepe Caballero, nos saludamos, y ya no les volveré a ver), y 5 de ellos son de la MM. Desde el km 3 sólo me ha adelantado una chica (con lo que acabo de comentar no quedaban muchos por adelantarme), pero vamos a ir casi juntos todo el tiempo hasta la MM (ella también hace la media), casi siempre 50-70 metros ella delante, aunque alguna vez llego a estarlo yo. Me ayuda a intentar fijar el ritmo, o a creer que me lo fijo. Sobre el km 12 alcanzamos el río, de muy ligera subida (eso es algo que me contó luego Antonio Rojas, pero eso es otra historia), y al menos la vista del Nalón, con la música de las aguas acompaña nuestros sufrimientos mientras vamos por su ribera. Así hasta pasado el km15 en el que cruzamos el puente y empezamos el ligero descenso.

Con el río a la izquierda bajamos, aunque con sensación de llano, hay una rampa muy vertical para pasar por un caminito por debajo de un puente, peligrosilla, de esas que te puedes lesionar si no la haces andando despacio, y nadie la hace andando despacio, no estamos ahí para perder segundos en ninguna parte, muy fácil y muy complicado de explicarlo y entenderlo. Algún trozo de tierra, llevadero y con rampa final jorobante. Sobre el km 18 si estamos en la población, y algún trozo de doble carril, pasado el 20 ya enfilamos hacia la línea de meta, algo más de público, al llegar a la recta de meta, oigo el speaker hablar con algún finisher sobre reavituallarse luego con un plato de callos y se me va la olla (no la de los callos, me callo que ya voy de spoiler, casi). En fin, que en meta se queda la chica que ha ido casi siempre delante de mí unos metros, cuando para la animo a que recupere, yo paso con poco menos de 2h11m que me hace posible, pero bastante difícil bajar de 4h30m y más teniendo en cuenta que aún va a ser más solitaria la segunda vuelta. Pues eso, sigo con la segunda vuelta, no ha habido avit en el 20 y eso me fastidia mucho, en la segunda vuelta, después del 36 estaré echando el resto, y va muy bien para los dos km finales, con agua ya me vale. Aunque hay bastante gente alrededor del avit sólo un chico con aquarius en vaso en una mano y botella de agua en la otra, le pido el agua pero no se entera y me la esconde mientras me da el aquarius, así que cruzo en diagonal a coger una botella yo mismo, rodeado de voluntarios mirando. Me quedo con esa sensación, puede que no fuera así, de que piensan que qué prisa tendrá nadie si va a tardar 4 horas y pico en un maratón.

Pues inicio el callejeo de los primeros km un poco difíciles, sin ni un solo corredor a la vista, y conocedor de que sólo llevaré uno detrás, que si mejora mucho o se retira, me quedaré último (seguramente le saco bastante, creo que de 5 a 8 minutos). Al pasar por km 24 estamos cerquísima del avit del 26 y pienso que igual los voluntarios nos pueden dar agua también, pero no, sólo para los que vienen por el otro lado, en su km26, podría desviarme a pedir, pero entre el tiempo que perdería (6-9 segunos ir, parar y volver) , y miedo a que me dijeran que no, porque no supieran si podían darme me hace evitarlo, decido tirar todo lo posible, pues así llegaré antes a ese km 26 y beberé. En una rotonda para pasar por debajo de un puente, el voluntario me dice que creía que sólo hacía la media, le contesto que Langreo me pilla lejos, y hay que amortizar viaje, se ríe y me dice que a la vuelta me anima de nuevo (en un km paso por allí otra vez). Aquí me voy cruzando con menos gente, porque me llevan más distancia y no es muy largo el tramo de doble carril. Al pasar por el km 25 echo mis números, en este maratón puedo comerme el coco todo el tiempo, al ir tan solo. Hecho números, y si no me cuelo, por encima de 6m30s puedo acabar en menos de 4h30m veo cuando miro ritmos de 6:10 y 6:20 y así sí que podría, aunque sé que en cualquier momento se pone en 7m y sin poder evitarlo, sin contar que el gps mío no va al ritmo de los km (400 metros de diferencia en la primera vuelta). Ahora a intentar mantener ritmo, poco antes de llegar al avit del 26 adelanto a dos chicos que van simultaneando carrera y andar, ánimos mutuos y sigo, ya como loco por pillar agua, llego al avit, algo después del 26 y aparte algo de aquarius pillo dos botellas (lo haré también en los otros dos avit que quedan), la verdad, no sé si es el aquarius o los geles, que no me llegan bien al estómago, y reduzco dosis de eso, pero no de agua. Las dos botellas las reparto entre lo que bebo y me echo, y me dirijo con ganas a atravesar el centro en busca de otra carretera para alcanzar el km 30. Me he cruzado otra vez con unos cuantos corredores, ya en familia, nos animamos mucho más que antes. Sobre 3h09m. Parece que pinta bien, creo he aguantado bastante decente entre el 20 y el 30, pero quedan km que se hacen duros, que no sólo cuesta mantener el ritmo por fuerzas, sino que se te puede dormir solo.

Vas recibiendo los ánimos de voluntarios y de algún policía local, los avit parecen algo más dormidos (alguno, no todos) en la segunda vuelta, ahora la vuelta por la carretera, me cruzo con los 3 chicos que van detrás, ánimos mutuos y a buscar la ribera del río, que seguro se va a hacer difícil, a menos de dos km de haber pasado el avit del 31 ya estoy loco por beber, adelanto a otro chico con problemas, no estoy seguro si de cansancio o musculares (creo que ambos) y le doy ánimos, vuelve a correr, pero enseguida se para  a andar y estirar. Continúo y por agua, a apretar para llegar al del 36. No hay nadie por ese camino, y el último aliento fue el de un voluntario al empezar el camino del río, me dijo “la fama cuesta, hay que pagarla” o algo muy similar, tuvo gracia, aunque no sé de qué fama hablaba, y menos allí, pero que te alegren un trozo del camino ya sirve.

Pues ala, Ribera del río y a pelear, continúo haciendo mates con el ritmo que me permitiría bajar de 4h30m y en algún momento se pone la cosa peor. El km 33 lo paso casi en 3h30m, he adelantado a otro corredor, que va más tranquilo ya, y supongo por lo poco que veo a lo lejos, que ya no pasaré a nadie más. Creo que la subida hace que pierda tiempo, en algún momento, lo sigo peleando, y procuro que no se me vaya a mucho, el peor parcial de 5 lo he hecho entre el 30 y el 35. Sobre 6m40s de media. Consciente de que casi seguro no podré beber más cojo dos botellas de agua en el último avit y nada de aquarius. El último km de subida se me vuelve a ir a 7 min/km y 3h48m en el 36, toca apretar lo que se pueda, y aunque no noto descenso hago dos por debajo de 6m20s (en gps, no sé si son iguales en los pasos de km).

Son km en los que no pasa nada, porque casi ni veo gente, alguien paseando que me cruzo, y poco más, sale otro km lento por la rampa dura de tierra, y 4h08 y pico en el 39. Un poco más de esfuerzo, entro en el tramo final, ya más dentro de Langreo, cruzo con algunos que ya están en su último km. Me cruzo con Quique que debe ir para el coche, le pregunto si tiene agua pero solo powerade, no me atrevo, prefiero agua o nada. Llego al 40 en 4h15m y algo, lo tengo ahí obre todo, porque aunque ahora me cueste confío en un último mil más rápido. 4h21m30 y muchos en km 41, creo que seguro bajo de 4h30m incluso calculo que podría de 4h29m pero tendría que ir a 6 min/km y a estas alturas es puro sci-fi. Aunque trato de apretar, no me reviento, pues bajaré de 4h30m y de 4h29 ni de coña.

Ya pillo la larga recta que va a llevar al giro de  la de meta, a lo lejos hay otro corredor, que tiene problemas físicos, parece de lejos le veo pararse, correr, pararse y volver a correr, no es que sea importante adelantarle, pero la pelea está en eso, así que me tenso aún más y empiezo a tirar todo lo fuerte que puedo, nos aplaude el público que hay cerca de meta, y él ya no ha vuelto a parar, estaba lejos, pero cada vez, menos, ni 20 metros en el giro (si no le pasa nada que no pretendo no le alcanzaré), y ni sé si estoy respirando o no, todo concentrado en darlo todo, se oyen aplausos al ver que él entra en la recta de meta y se redoblan al aparecer yo enseguida, el speaker le anima y enseguida a mí también, se adelanta desde meta para chocar mano con él y enseguida conmigo (animó mucho en los dos pasos por meta), no le voy a  alcanzar, pero el calentón me sirve para bajar seguro de 4h29m pues el reloj bruto marca algo menos cuando estoy a punto de entrar. Y meta, no sé, 4-5 metros detrás de él, pero muy contento del final. Sé que no es mínima para ningún gran campeonato, pero dentro de la situación que estoy  ha estado bien, y las últimas que peleé no lo conseguí (sin que piense que lo hiciera mal), desde Laredo que no bajaba de 4h30m.

Paro en seco, porque el esfuerzo final ha sido muy duro, y yo ni me preocupaba por él. Felicito a mi compañero de últimos metros, y voy al avit a por agua, pregunto por bebidas de zero azúcar (coca cola y aquarius que tienen), no hay pero empiezan a servirme agua en vasos, bebo y me echo por la cabeza, se ríen (de bien) los primeros 4-5 vasos, ven que no paro y me ponen como 20 más, no me echo todos, pero en total entre beber y echarme (algo más de esto último) han debido ser 15 o por ahí, me cuesta varios vasos el irme recuperando, pero con una sonrisa, y no es más que el cansancio acumulado de los esfuerzos. La medalla es un poco tristona, de maderilla o corcho, o algo así, sí que hay más cosas en meta, frutos secos, fruta, y varios pastelillos de diversa índole, además de las bebidas.

Me dan tiempo oficial de 4h28m58s brutos, no ha salido tiempos netos, imagino serían 4h28m47s Ni soñarlo al pasar el km 41. En meta 127 clasificados y 5 dqf, uno de ellos que llegó detrás mío, debía ser por recortar -involuntariamente, supongo-, le sacaba más de 15 minutos y entró 2 después que yo, así que al final 4 por detrás mío en clasificación), raro tanto dqf. Con el152 ppm (el tramo final claramente a más de 170 e incluso por encima de 185, después del km42). 4402 calorías y 43,01 km que me ha dado el gps. Ya me recupero, las patas están jorobadas, la rodilla la noto más (en esos momentos ni recuerdo si la notaba mucho o poco desde el 40). Hablo con Antonio, que ha hecho bastante buena carrera, y ya debo marchar a ducharme, pillaremos coche y comeremos de camino.

La subida al pabellón y sus vestuarios no lleva cronometraje, con lo que afortunadamente no tendré fuera de control, me cuesta subir, a mi cuerpo más. Recojo bolsaza del guardarropa y aprovechando mi plenitud física bajo en ascensor a los vestuarios (son dos plantas, ojo), allí están un montón de los que nos hemos animado, lo uqe pasa es que desnudos (o casi, no os hagáis ilusiones) no les reconozco de la carrera (allí por las camisetas somos todos más fáciles de reconocer, menos yo, que a mí no me quiere reconocer ni el médico cuando estoy enfermo). Unas charlas, me preguntan si es la primera y les confirmo que de este mes sí. Igo que llevo este año 20 (más 3, es decir, las de 50 y 55), y alguno no se lo cree, no por dudar, sino porque haya tantas. Charlas, y de repente cae uno en la ducha, una leche que se da el pobre, y es que le había dado una rampa muy fuerte, le ayudan a recuperarla, pero tarda la cosa, por el rato que grita, afortunadamente al final se recupera y parece que el porrazo no ha sido tampoco importante. Es el mismo chico que me ha ganado por poco, y lo curioso (eso lo sabré el día siguiente, tengo que hacer spoiler, no voy a hacer crónica del lunes a continuación), es que ha quedado 31 de su categoría (yo el 20ª de la mía), y de haberse hecho la carrera tres meses después habría sido yo cuarto a 2 segundos de él, habría tenido guasa. Es decir, viejunillos no éramos muchos. No importa, me voy contento con la marca, el esfuerzo, la charlilla de vestuarios (que con lo lento que soy dura mucho).

Salgo el último del vestuario con René (estoy dando el dato de que también es lento en los vestuarios, para salir tan tarde como yo), y como ya salgo digo de ir con él al bar y tomar una cerveza y otra para el camino. Se lo digo a Antonio, que esperándome ya ha comido algo en una feria medieval, no hay problema y vamos rápido a un bar (lo de rápido, es un eufemismo, pues no cuesta nada ir moviendo las piernas), y allí me tomo una y algo y me llevo otra y pico puesta, René se queda que de dos aún le queda una y media (a esto no es fácil ganarme) y quedo que si va a hacer el maratón de Sevilla, me consulte cualquier duda. Al fin salimos y a tirar carretera, aprovechamos para parar cuando hay que poner gasolina, ya es tarde para menú en el área de servicio, miro la carta, veo callos a 5 euros, y claro, eso es ir provocando, eso y un pincho de tortilla (si pido un plato combinado con los callos, salimos de madrugada, el pincho es rápido). Bueno, pues traen los callos, que a 5 euros no pueden ser muy grandes, y no lo eran, los callos no eran muy grandes, pero la cazuelilla donde iban tenían diámetro de piscina olímpica, y la misma cantidad de callos participantes que una olimpiada, el típico plato que quien lo ve, se queda sin hambre. A continuación me traen el pincho de tortilla, normal de bulto, y me dio la risa (anda, que si traen el plato combinado). Bueno, pues como en las olimpiadas, mi misión de la cazuela olímpica es tardar lo menos posible en vaciarla, le doy dos mordiscos a la tortilla luego (dos semanas después habría tardado otro), y sin café ni nada nos vamos, para que no se haga más tarde.

Al final, con las retenciones que había en Madrid, me deja en la estación de tren de Alcorcón y puede continuar sin retenciones, espero. Antonio llegó a su casa en Jaén a las dos de la mañana y yo a Madrid pasadas las diez de la noche, muy cansado, muy incómodo de haber viajado en coche (y no hay queja, que iba bien cómodo y muy bien acompañado), pero con las piernas ya muy recuperadas y más el lunes, me sorprende. Se hace dura la logística, y veremos cómo será en algunos de los maratones en los que será elaborada. Pero contento de este primero, mi primer maratón en Asturias, con corredores con los que ha sido un honor (ni una mala cara vi). Lástima que no haya más participación, triste que son pocos participantes para los tiempos “lentos”, que eso ayuda mucho a crecer la participación en un maratón (imagino que la mayoría prefiereir a uno de los grandes, en los que no queda tan atrás (igual me equivoco, lo he visto así).
La 20ª del año y 65ª total, y con ganas de la siguiente me ha dejado esta. A ver cómo reacciona mi rodilla para la próxima, y si quito alguna @ de mi cuerpo (más otros problemas que no tienen que ver con lo físico, pero eso es otra historia). Ilusión y ganas salen renovadas.

[front242]

bravo Julián!
Otra muesca más

[Julián11]

Gracias número 3.
Mientras sigan siendo muescas y no muecas, ahí estaremos.