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Aunque me haya rezagado más de la cuenta , ahí va mi relato de la carrera Norte vs Sur:Debido a llevar tan sólo quince días de entrenamiento, concretamente era la décima vez que me calzaba mis zapatillas de running, me encontraba bastante intranquilo el día anterior por si no era capaz de superar el reto de la carrera. Además mis zapatillas más nuevas me habían ocasionado a comienzos de semana una rozadura considerable y tuve que improvisar y optar por utilizar mis primeras zapatillas que en su día deseché por provocarme fascitis.Al llegar a Plaza Castilla me asombró la impresionante cantidad de corredores que allí había y eso que faltaban cuarenta minutos para el pistoletazo de salida. Un rato largo estuve estirando y correteando para calentar por un lado y tranquilizarme por otro. En mi mente mi objetivo era terminar la carrera y si podía hacerlo a ritmo de 5:50 el kilómetro pues miel sobre hojuelas.Tras darse la salida tardé cerca de dos minutos en llegar a los arcos y empezar a correr pero el hecho de que se tratara de una carrera masiva no me afectó salvo en la curva de la calle Platerías en la que hubo que detenerse por la gente que cambia de dirección sin previo aviso. Al pasar el segundo kilómetro, totalmente llano, por encima de mi ritmo en mente ya deseché la idea de conseguirlo y me concentré en mi objetivo principal de acabar en el menor tiempo posible.Físicamente no noté ninguna molestia salvo en la zona de los toboganes en la que las piernas las sentí duras pero enseguida se me pasó. El calor tampoco me afectó. Entorno al kilómetro cinco me adelantaron los globos de 60’ y decidí tratar de seguir su ritmo, pero nada más pensar esto llegó la zona de avituallamiento líquido y tras coger la botella, abrirla y echar un trago, levanté la cabeza y los globos ya estaban en la lontananza. Una vez perdida la referencia continué a mi aire, cada vez más contento al ir viendo pasar los puntos kilométricos a un ritmo prácticamente invariable de 6:15 y sin sentir ninguna molestia importante. :good: La cuesta del Ángel Caído la subí tranquilamente a tren y adelanté a bastantes corredores, sin que me resultara tan terrorífica como parecía a priori. Al final logré mi objetivo de terminar la carrera en un tiempo de 1:02:41 según la organización.Esta semana me compraré unas zapatillas nuevas, idóneas para corredores pesados, seguiré entrenando con ilusión y trataré de superarme en mi próximo reto: la carrera Proniño dentro de quince días.